Es cierto, soy una pequeña gota
Pero de la creación soy la fragua
Sin mí la vida se agota
¡Soy su savia… soy el agua!
Puedo juguetear en la Aurora Boreal
Y desde el arco iris,
Dibujar la sonrisa de Dios, sin más diluvios.
Puedo cabalgar sobre las olas,
Reñir con la ardiente lava
Y someterme mansamente a la caricia de la brisa
En la quietud del lago.
Puedo desprenderme en el impetuoso torrente,
Mecerme en la espuma
Y bailar con su ronroneo
En la espesura de la bruma.
Puedo refrescar en la sed abrasadora,
Bañar músculos y penas
O enloquecer por cuentagotas
A beduinos prisioneros del Simún.
Puedo ser hiel o miel.
Puedo besar a la muerte y al capullo
Y mediar entre la ternura y el orgullo.
Puedo ser tempestad en la madrugada
Y rocío en la mañana.
Puedo ser salvaje y letal en mi caída
O dulce y suave en la garganta contraída.
Puedo ser portadora de virus o de vida,
Bálsamo, veneno o antídoto para la ira.
En fin, puedo serlo todo.
Estalactita o savia en los tallos.
Ocelo o camuflaje,
Espejismo u oasis.
Abrevadero o basurero.
Cisterna o colchón amniótico.
Pozo, río o manantial.
Destructora o escultora:
Devoro cosechas,
Tallo paisajes
Y labro huertas.
Soy lágrima de tristeza o de alegría,
Soy llanto de adiós o bienvenida,
Soy océano, laguna o fuente fría.
Sin mí no podrías existir:
Porque soy la vida en una gota...
¡Y Tú eres una gota de la vida!
Somos así, en nuestra lucha,
ResponderEliminarla maravilla más grande,
escogidos para nuestro fin,
y con todo,
estamos aquí en este tiempo y espacio.
Gracias